Cuando Todo es Oscuridad
Han sido días, creo que ya meses muy difíciles. A veces cuando voy a orar no sé ni por dónde empezar. Las personas que quiero y yo misma estamos pasando por situaciones llenas de mucho dolor y confusión. El salmista dijo que, aunque pasara por el valle de sombra y de muerte, por el valle más oscuro, no temería porque el Señor estaría con El. Pero a veces me siento como si no estuviera pasando por ese valle, sino que vivo ahí. Los problemas vienen, la vida golpea, y miro alrededor y todo parece ser una oscuridad densa. Veo a las personas que están lejos y cerca de mí y están sufriendo. Personas vienen y me hablan con corazones rotos por heridas del pasado y también por heridas nuevas. Y todo es oscuridad. Porque aun cuando no hay problemas, la rutina nos cansa, el día a día nos deja vacía y el corre corre del diario vivir no nos lleva a ningún lado. No digo todo esto porque me he entregado al pesimismo. Por ahí dicen que la vida cristiana es una vida llena de prosperidad, felicidad y ausente de problemas, y si los hay es porque no hemos sabido sacarles provecho a las bendiciones de Dios. Pero Salmos 74: 20 dice que la tierra está llena de oscuridad. Y Cristo mismo dijo que en el mundo íbamos a tener aflicciones. Entonces estar rodeada de oscuridad no siempre es señal de pecado, a veces es simplemente prueba de que vivo en un mundo gobernado por las tinieblas. No tengo control sobre el resto del mundo, pero si puedo entregar mi vida al control de Aquel quien es la Luz. Ahí está el secreto. Ahí está el secreto de la felicidad, la paz, y el descanso verdadero de la vida cristiana. En este valle de sombra no hay temor porque el Señor está de nuestro lado. El salmista entendió que su bienestar no estaba en no pasar por algún lugar oscuro, sino caminar con Aquel que dijo: Hágase la luz, y se hizo.
Aunque no entendamos y nos parezca locura, caminar en medio de la oscuridad no siempre es malo. Si estás en oscuridad porque estás lejos de la Luz, caminando en las tinieblas de tu pecado, entonces estás en graves problemas. Pero si estás caminando en oscuridad en fe y de la mano de Cristo, no tengas miedo. Aunque no veas nada, agárrate fuerte de la mano de Cristo. Él va delante de ti. Aunque lo único que veas sea oscuridad, confía en sus promesas. Él sabe lo que es estar rodeado de tinieblas, lo vivió en carne propia. Cuando estaba en la cruz, al mediodía la tierra se llenó de oscuridad y la luz del sol desapareció. El Padre le dio la espalda. Parecía que el príncipe de las tinieblas había triunfado y la luz se apagó. La Luz del mundo se apagó. Él pasó por el valle de sombra y de muerte. Pero…. PERO…. Pero… las tinieblas no pudieron vencerlo, el Sol de Justicia se levantó con sanidad en sus alas para brillar en medio de ti y de mí. Él es el único que puede prender la luz en dondequiera que tú estés. Él es la Luz con la que vemos. Él es la Luz del mundo, pero solo los que se acercan a Él y lo siguen pueden caminar bajo su luz. Camina bien cerquita de Él y veras que, aunque todo a tu alrededor este oscuro no habrá temor. Tú corazón estará tranquilo y confiado en medio de lo desconocido, en medio del dolor, y en medio del caos. Cuando era pequeña me daba miedo dormir sola, en la oscuridad de mi cuarto me venían miles de terrores a mi mente, pero si mi mamá dormía conmigo me sentía segura. Dormía tranquila toda la noche no porque había luz, el cuarto seguía oscuro, pero mi mamá estaba conmigo. Ella era mi tranquilidad y mi seguridad. Aunque pasemos por el valle más oscuro la presencia de Cristo nos llena de paz, no porque podemos verlo todo, sino porque podemos ver a nuestro Guerrero Victorioso, guiandonos, cuidandonos, llevandonos a un camino de provecho para nosotras.
Cuando nos acercamos a Cristo y somos alumbrados por su presencia todo cambia. Al fin podemos ver. Al fin podemos encontrar el camino que nos lleva al descanso, la felicidad, satisfacción, y bienestar que tanto nuestros corazones buscan. ¡Al fin se prende la luz en nuestras vidas! ¿Quieres que se prenda la luz en tu oscuridad? Acércate a Cristo. No quiere decir que su luz te dará a conocer las cosas terrenales que aun para ti son inciertas. No es que se irán todos los problemas y todo será color de rosa. Caminar con Cristo, estar bajo su luz significa que lo podemos ver a Él más claramente. Y cuando vemos a Cristo tal como Él es somos cambiadas de adentro hacia fuera. Cuando Pablo iba a Damasco, “una luz del cielo de repente brillo alrededor de él” (Hechos 9:3). Y sus ojos vieron por primera vez a Cristo, quedo ciego a las cosas del mundo por un tiempo, pero experimentó la Luz verdadera. Y su vida cambió radicalmente desde ese encuentro. ¡Qué el Señor se encuentre con nosotras! Sí, Señor ven y enséñanos tu luz, alumbra nuestros ojos y que quedemos ciegas a las cosas del mundo y quedemos cautivadas por el brillo de tu mirada.
Si te sientes oprimida por las tinieblas, si todo a tu alrededor es oscuridad, medita en estos versículos y que el Señor venga e ilumine tu vida.
La gente que estaba en oscuridad ha visto una gran luz. Y para aquellos que vivían en la tierra donde la muerte arroja su sombra, ha brillado una Luz. Mateo 4:16
Yo soy la Luz del mundo. Si ustedes me siguen, no tendrán que andar en la oscuridad porque tendrán la Luz que lleva a la vida. Juan 8:12
Caminen en la Luz mientras puedan, para que la oscuridad no los tome por sorpresa, porque los que andan en la oscuridad no pueden ver adónde van. Pongan su confianza en la Luz mientras aun haya tiempo; entonces se convertirán en hijos de la Luz. Juan 12:35-36
El Señor es mi Luz y mi salvación, entonces ¿Por qué habría de temer? Salmos 27:1
Dios los ha llamado a salir de la oscuridad y entrar a su Luz maravillosa. 1 Pedro 2:9
Su llegada es tan radiante como la salida del sol. Rayos de luz salen de sus manos donde se esconde su imponente poder. Habacuc 3:4
Sin embargo, para ustedes que temen mi nombre, se levantará el Sol de Justicia con sanidad en sus alas. Saldrán libres, saltando de alegría como becerros sueltos en medio de los pastos. Malaquías 4:2.
Gracias a la tierna misericordia de Dios, la Luz matinal del cielo está a punto de brillar entre nosotros, para dar luz a los que están en oscuridad y en sombre de muerte, y para guiarnos al camino de la paz. Lucas 1:78-79
Tu Palabra es una lámpara que guía mis pies y una luz para mi camino” (Salmo 119:105).